Guayoyo y Canelé

Édition Noël La Navidad y el Año Nuevo en París...el sueño de muchos, pero la verdad, una ligera decepción. Poco tiene de navideño y festivo esta época del año en una ciudad donde los turistas hacen siempre lo mismo sin importar que fecha marque el calendario. (La respuesta correcta: COMPRAR) Claro, sigue siendo un momento familiar y como muchos países se reunen los seres queridos para el 24-25 y el 31 todos TODOS se van de fiesta con amigos, la base de la reunión: comer!. El mundo de las exquisiteces se presenta ante ti en todas las tiendas para hacerte la boca agua y un poco más cruel para demostrarte en enero cuánto fuiste capaz de comer. Además de la comida y los adornos en las calles principales, el ambiente parisino-navideño no lo hace la gente o el ambiente, ese que se siente en Venezuela que hay música por todos lados y de manera sorprendente la gente olvida los problemas y por un mes es feliz. Aquí, el ambiente es el mismo, el twist lo pone como siempre ¡lo fashion! Paris

(Este post tiene 2 partes: Let it go + Cartas Parisinas). Let It Go. Se atribuye a muchos factores el hecho de no liberar/ olvidar/ dejar pasar algunos hechos: el signo zodiacal, el temperamento, la locura, etc. Yo soy de esas personas que si pudiera tener un poder sería saber lo que piensan los demás, me carcome la curiosidad y la necesidad de saber que dice e l otro  de mi, eso con cualquier persona: alguien que acabo de conocer o el que se quedó mirándome mientras cruzaba la calle...imagínense con alguien con significado particular -mínimo o gigantesco. Soy adicta a las opiniones de los demás y al que dirán. Obviamente no es algo de lo que esté orgullosa... ¿Cómo lo logran? en algún post anterior reflexionaba sobre algo parecido, ¿cómo hacen los hombre para decir "ya no te quiero", tomarse una cerveza y seguir con sus vidas?. Yo, yo no logro dejar ir las cosas tan fácilmente, no sé "cerrar el ciclo/círculo" o lo que sea! Me quedo atascada en el proceso de de

Primera parte. La ciudad de las luces y sus historias de amor... Las cosas no siempre son como nosotros queremos..y de una u otra forma todo gira en torno a la felicidad. Ese beneficio personal que intentamos conseguir en cada una de las cosas que hacemos. ¿Por qué entonces, si es lo que todos queremos, es tan difícil encontrarlo? Somos seres impresionantemente complicados y, honestamente, eso de la simplicidad es un chiste.  París respira gracias a sus historias de amor, 99 por ciento alimentada por historias de turistas, nosotros, que los vemos todos los días, vivimos quejándonos del cliché que eso significa, no entendemos la importancia -o el valor- de las fotos de bodas en el Louvre, en Sacré Coeur o incluso en La Bastille. Olvidamos el significado del romanticismo porque olvidamos ver París con esos lentes de romanticismo, hasta que nos pasa a nosotros...entonces somos ellos. Es entonces cuando los turistas nos  ven, a esos "franceses" que no dejan de besuquearse