Cuestión de años
Cuando somos pequeños tenemos unas ganas inmensas de crecer, pero ¿qué hacemos cuando ya crecimos?
Es increíble cómo con los años nos damos cuenta de tantas cosas, no; no tengo 40 o 50 o 100 y son apenas 26, sin embargo, se sienten con más peso en una sociedad donde tenemos que crecer con otro tipo de responsabilidades, otra sociedad donde las cosas y la vida no son como la de nuestros padres y las dificultades son otras.
Soy joven y son apenas 26, si ¿y entonces?. No creo que tengamos que tener 50 para darnos cuenta de que la vida efectivamente cambia y que ahora los 30 y sus clichés y sus presiones están más cerca que hace un año; porque crecemos dándonos cuenta, no son solo años como piensa todo el mundo y son en cambio años que aportan pequeños detalles. Una arruga, un kilo de más o mis primeros 10km y mi rutina deportiva. Mis ganas de sentir que pertenezco y de que encontré mi lugar... Los 26 de hoy son sin duda muy diferentes a los de las generaciones anteriores, donde el camino era más estable y las crisis menos visibles, el mundo estaba menos jodido y las guerras (culturales, religiosas, económicas y militares) eran menos agresivas, hoy tenemos eso y muestras de belleza y de otras oportunidades; es una lástima sin embargo que sea más lo negativo que lo positivo, pero lo bueno y el cambio siguen ahí y cada quién aporta algo, con suerte positivo, cada día.
Los 25 fueron sinónimo de cambios, no sé si fue la mezcla de la situación más el hecho de saber-me en transición tuvieron algo que ver, en éste año en que te acercas más a los 30 y se te acaban las reducciones y las entradas gratuitas, en Francia, oficialmente entras a la "adultez" al cumplir los 26, se acaba la reducción del cine, metro o los museos gratuitos. Fue mi año de comenzar a hacer ejercicio, de meditar, de estar por primera vez sin empleo y sin clases (nini en todo su esplendor) y darme cuenta de que hay que crecer y de que no puedo estudiar toda la vida, que hay que "buscarse la vida" y salir realmente del nido familiar, aportar nuestro grano de vida y volverse realmente (o en medida de lo posible) independiente.
Otro año en donde me quiero un poco más y mi relación conmigo misma es un poco más sólida y segura, por lo que mi relación con los otros es ligeramente más estable y más profunda. La claridad es -hasta cierto punto- más real.
Son unos 26 que comienzan con ganas de tener muchas cosas más, más estabilidad, claridad, seguridad, confort y un camino profesional claro y estable. No, no tengo nada de eso pero tengo los proyectos, la página en blanco que me dice que todo es posible y que se combina con la filosofía de trabajar hoy el futuro de mañana. Buscar con mi alma y ser eso que quiero, darle todo al universo y dejarlo actuar.
Voilà, il y a que ça à faire... laisser agir l'univers.
Es increíble cómo con los años nos damos cuenta de tantas cosas, no; no tengo 40 o 50 o 100 y son apenas 26, sin embargo, se sienten con más peso en una sociedad donde tenemos que crecer con otro tipo de responsabilidades, otra sociedad donde las cosas y la vida no son como la de nuestros padres y las dificultades son otras.
Soy joven y son apenas 26, si ¿y entonces?. No creo que tengamos que tener 50 para darnos cuenta de que la vida efectivamente cambia y que ahora los 30 y sus clichés y sus presiones están más cerca que hace un año; porque crecemos dándonos cuenta, no son solo años como piensa todo el mundo y son en cambio años que aportan pequeños detalles. Una arruga, un kilo de más o mis primeros 10km y mi rutina deportiva. Mis ganas de sentir que pertenezco y de que encontré mi lugar... Los 26 de hoy son sin duda muy diferentes a los de las generaciones anteriores, donde el camino era más estable y las crisis menos visibles, el mundo estaba menos jodido y las guerras (culturales, religiosas, económicas y militares) eran menos agresivas, hoy tenemos eso y muestras de belleza y de otras oportunidades; es una lástima sin embargo que sea más lo negativo que lo positivo, pero lo bueno y el cambio siguen ahí y cada quién aporta algo, con suerte positivo, cada día.
Los 25 fueron sinónimo de cambios, no sé si fue la mezcla de la situación más el hecho de saber-me en transición tuvieron algo que ver, en éste año en que te acercas más a los 30 y se te acaban las reducciones y las entradas gratuitas, en Francia, oficialmente entras a la "adultez" al cumplir los 26, se acaba la reducción del cine, metro o los museos gratuitos. Fue mi año de comenzar a hacer ejercicio, de meditar, de estar por primera vez sin empleo y sin clases (nini en todo su esplendor) y darme cuenta de que hay que crecer y de que no puedo estudiar toda la vida, que hay que "buscarse la vida" y salir realmente del nido familiar, aportar nuestro grano de vida y volverse realmente (o en medida de lo posible) independiente.
Otro año en donde me quiero un poco más y mi relación conmigo misma es un poco más sólida y segura, por lo que mi relación con los otros es ligeramente más estable y más profunda. La claridad es -hasta cierto punto- más real.
Son unos 26 que comienzan con ganas de tener muchas cosas más, más estabilidad, claridad, seguridad, confort y un camino profesional claro y estable. No, no tengo nada de eso pero tengo los proyectos, la página en blanco que me dice que todo es posible y que se combina con la filosofía de trabajar hoy el futuro de mañana. Buscar con mi alma y ser eso que quiero, darle todo al universo y dejarlo actuar.
Voilà, il y a que ça à faire... laisser agir l'univers.
Bonne réflexion Pao mais tu sais, ça ne sert à rien de se mettre trop de pression. Notre époque, justement,en est une d'incertitude, où les gens ne veulent plus nécessairement travailler au même endroit pendant 35 ans puis prendre la retraite et toucher une pension confortable. À mes 34 ans, je me considère encore en transition et je pense à ma maîtrise. Il faut voir la vie comme un terrain d'exploration. On se prend toujours trop au sérieux et pourtant... On n'est qu'une infime particule dans l'univers. C'est bien de continuer à s'interroger, à explorer, à essayer de nouvelles choses. Tu as toujours fait ça et je t'encourage à continuer. 26 ans, après tout, ce n'est qu'un chiffre de plus!
ResponderEliminarJe t'embrasse, Julie