Superficial, ¿yo?!

Lo que ves, es lo que eres. El mundo es un espejo.

(Proverbio chino)

La verdad, creo que si soy superficial, un poco si! Pero para que entiendan mi posición les presentaré como llegué a esta ‘conclusión’ (aunque lo he sabido desde siempre).

Mi primera semana de 24 años ha sido un poco mmm ocupada, por ponerle de alguna manera, ya que, entre pasteles y felicitaciones fui a los 2 eventos de Benetton mencionados en el post anterior y el jueves fui a quitarme las muelas de juicio (o cordales, como decimos en Venezuela) y desde entonces llevo 3 largos días de reposo y gracias a eso soy la representación humana de la señora cara de papa.

Estos acontecimientos me dejaron pensando en cómo -cuando conocí a una blogger- no me importó (porque lo hago siempre) hablar de lo importante de la superficialidad venezolana y como ella me miró espantada por considerar-me superficial. Hablábamos de tacones y si eran cómodos o no, nada demasiado profundo.

Al día siguiente en el Photo shooting de bloggers, la más gordita era yo, y tomando en cuenta que no había un stock con todas las tallas le comenté a mi estilista que traía una faja y que me la pondría. Ella me contestó que no era necesario, que como me sintiera bien. Acá entre nos, no dudé en ponérmela!

Luego, cuando pasé a que me tomaran las fotos, hice un chiste de photoshop y la fotógrafa me dijo que no, porque ella cree en la belleza natural. Lo cual -aquí entre nos, se me hizo un poco “comeflor” (quiero aclarar, no tiene nada de malo ser comeflor!!!) y para una fotógrafa, un poco ilusorio.

¿Por qué recordé todo esto?, bueno como comenté antes, porque llevo 3 días como la sra. cara de papa y se me hace terrible verme así, sí entiendo que estoy operada y es normal, PERO, ¿por qué no hacer todo lo posible para vernos mejor?, incluso en situaciones donde no esta del todo dentro de nuestras manos.

Constantemente hablo de mi talla y mi peso, y de cómo por más que hago ejercicio amo comer y me gusta disfrutar –siempre que me mantenga sana- de los placeres de la vida. Esta adicción a lo superficial, nace en definitiva en Venezuela, donde las artistas de los medios, los medios en si mismos y la sociedad en general te impulsan a vivir en  esa constante búsqueda de verse cada vez mejor.

Al llegar a Mexico, uno de mis principales shocks culturales fue el ver cómo las mujeres no se preocupan -prácticamente- en conocerse, en tener esos tips de belleza y en conocerse para sacar lo mejor de sí. Porque son solo las chicas de la televisión las que se preocupan al mil ocho mil por eso. El resto, a mi parecer, simplemente se adapta con lo que tiene.

Yo, no veo el problema de buscar y conocer lo que mejor te queda o cómo puedes tener trucos para verte y por lo tanto sentirte mejor!

En Venezuela, las operaciones plásticas son la principal fuente de transformación, con lo que yo particularmente no estoy de acuerdo, pero, si te hace sentir mejor y estas de acuerdo con los riesgos, ¿por qué no?. Yo creo en la superficialidad consciente (que buen término me acabo de inventar!, pero es verdad!). 

Haz todo lo posible, sin hacer nada que pase los límites de lo sano y si los pasa, ten claro tus riesgos.

Consejos de Tyra Banks (como los del LBD) me tienen fascinada, son simples trucos para conocerte y comprar con consciencia de tu forma de cuerpo. Una buena faja, saber que colores de maquillaje te quedan mejor, o cuales son tus mejores cualidades valen más que la belleza interior.

Ahora, no tengo nada en contra de la belleza interior!! Jaja eso se refleja de manera natural cuando eres feliz con quién eres, pero, creo que tiene mucho que ver si te ayudas y te vuelves integral respecto, así,  reflejarás mucho más que una bonita personalidad!!.

Lo mejor de todo es que hay muchas formas de aprender!! Si no te gustan las revistas, o son demasiado estrafalarias para ti, siempre hay sitios de Internet (el de Tyra Banks o Giulana Rancic que habla de belleza por ejemplo), hay buenos libros (Glamour de Margarita Singg, el libro amarillo de Palacio, etc.) o algunos programas de televisión que pueden dar buenos tips.

Honestamente, tenemos todos los elementos para resaltar eso que nos gusta más de nosotras y disimular lo que nos causa inconvenientes, sin importar tu talla. 

Si hacerle caso a esos miles de detalles me hace superficial, ¡pues sí que lo soy!